El equipo Toro Rosso podría cambiar de dueños si se confirma la noticia que adelanta el diario suizo Blick: la compra del equipo por parte de un grupo árabe de inversores que ya tendrían cerrado un acuerdo con Dietrich Mateschitz.
Después de que se prohibiera el uso de coches cliente, el conjunto italiano ha perdido competitividad y hace unos meses se hizo pública la cantidad de 30 millones de dólares como el precio de venta impuesto por Red Bull.
Se desconoce si este cambio de dueños podría afectar a los pilotos, aunque se especula con que la continuidad de ambos, especialmente la de Sebastian Buemi que reside en Bahrein, estaría prácticamente asegurada a corto plazo.